El piloto español de Ferrari cortó una racha de triunfos de Max Verstappen, que tuvo un fin de semana para el olvido.
El circuito urbano de Singapur sin duda alguna dejó uno de los mejores Grandes Premios de la presente temporada y todo gracias a los problemas de Red Bull del sábado y las oportunidades de victoria para otros pilotos.
La salida de la decimosexta prueba puntuable del año se dio con mucha tranquilidad y sin incidentes, con un Carlos Sainz que logró mantener la primera posición, mientras su compañero de equipo lograba pasar al Mercedes de Russell para colocarse en segundo lugar.
Al mismo tiempo, Lewis Hamilton logró adelantar a dos pilotos en la arrancada, aunque se vio forzado a devolver la posición con George Russell, con Lando Norris también pidiendo por haberse excedido en los límites de pista, devolviéndosela un par de vueltas más tarde.
Por su parte Max Verstappen logró ganar un puesto, ascendiendo hasta el décimo lugar. Vueltas más tardes, logró pasar a ambos Haas y se puso octavo, mirando ya al grupo de los equipos de la zona alta.
La carrera se estabilizaba pasadas las diez primeras vueltas, con los pilotos yendo extremadamente lento para conseguir gestionar los neumáticos e irse en procura de una única parada.
En la vuelta 19, Logan Sargeant se golpeó contra el muro en la curva 8 y perdió su alerón delantero; al regresar a boxes, dejó muchos trozos de fibra de carbono, provocando así la salida del coche de seguridad para limpiar la pista.
Tras el incidente todos los pilotos, menos los Red Bull y Valtteri Bottas que salieron con el neumático duro, hicieron su parada; Carlos Sainz mantuvo la primera posición, pero Charles Leclerc perdió el segundo lugar con Russell y Norris.
En el relanzamiento y con el pasar de las vueltas, los Red Bull fueron adelantados, perdiendo poco a poco posiciones al ir con unos neumáticos duros más usados. Mientras tanto, desde el box de Ferrari le notificaban a Sainz ralentizara el ritmo para que Russell no pudiera hacer dos paradas.
Al llegar a la vuelta 40 y tras ceder varias posiciones, Sergio Pérez decidí detenerse en zona de pits, con Max Verstappen haciendo lo propio un giro más tarde, regressando a pista en el fondo del clasificador.
En la vuelta 43, Esteban Ocon se quedaba parado en las primeras curvas, provocando un coche de seguridad virtual el cual fue aprovechado por ambos pilotos de Mercedes para ingresar a pits y colocar neumáticos medios nuevos.
En las últimas vueltas, los dos Mercedes conseguían recortar mucho tiempo hasta que, en la vuelta 54, George Russell y Lewis Hamilton lograban pasar a Charles Leclerc para ponerse tercero y cuarto respectivamente y empezaban a mirar a Lando Norris.
Cuatro vueltas más tarde, los Mercedes ya estaban en zona de DRS y los cuatro pilotos, Sainz, Norris, Russell y Hamilton, se diferenciaban únicamente por 1''12 segundos de diferencia.
Finalmente y al caer la bandera a cuadros, Carlos Sainz se llevaba una gran victoria, Lando Norris culminaba segundo, mientras que Lewis Hamilton se quedaba con el tercer lugar luego que su compañero de equipo se pasara de frenada y terminaba impactando su coche contra el muro
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