Garagisti & Co GP1, un supercar como los de antes

El imponente modelo se presenta como una exclusiva obra inspirada en los 80, 90 y principios de los 2000, diseñado por un ex-diseñador de Bugatti y Rimac.

Garagisti & Co es una marca británica orientada a revivir la esencia de los superdeportivos analógicos, priorizando la experiencia pura de conducción en lugar de la tecnología digital dominante actualmente en la industria automotriz.

Su más reciente creación es el Garagisti & Co. GP1, una declaración de amor a la conducción pura, impulsado por un motor V12 manual construído desde cero, con atención al detalle, estética clásica y tecnología moderna, pero sin renunciar a lo esencial.

El potente corazón atmosférico de 6.6 litros desarrollado por Italtecnica, es capaz de producir 800 CV a 9.000 rpm y más de 700 Nm de par máximo, logrando un bello sonido con sabor a competición del pasado.

Para alegría de los puristas, toda la potencia se gestiona a través de una caja de cambios manual de 6 velocidades de Xtrac, otra famosa compañía de competición. El interior sigue esta tendencia de modernismo con una vuelta a lo simple y analógico, lo que significa que no hay una gran pantalla con sistema de infoentretenimiento.

Solo se aprecia un puesto de conducción muy minimalista y claramente dividido en dos por una estrecha consola central con una palanca da cambios manual y distintos controles físicos.

El volante presenta tres radios finos y ningún botón, con el resto del interior bellamente acabado en cuero marrón y fibra de carbono, trabajo hecho de manera intencional para reducir al mínimo las distracciones y acentuar la conexión con la conducción.

Todo esto hace del GP1 un coche ultraligero y extremadamente rápido, pero al mismo tiempo capaz de ofrece un alto nivel de confort, una sonoridad interior muy controlada e incluso con espacio suficiente adentro para ponerlo al nivel de un Gran Turismo.

El Garagisti & Co. GP1 llegará con una limitada fabricación de solo 25 unidades, todas ellas hechas a mano en el centro de Reino Unido, cada una de ellas a un precio de 2,82 millones de euros.